VERACRUZ, Ver.- En espacios sucios, reducidos y malolientes subsisten las 45 especies de fauna silvestre que alberga el zoológico de Veracruz “Miguel Ángel de Quevedo”, también conocido popularmente como Parque Viveros, se quejan visitantes.
El recinto presenta severos daños en su infraestructura por la falta de mantenimiento de al menos tres gobiernos municipales, según el argumento de autoridades en funciones para justificar las afectaciones evidentes.
Las jaulas donde se encuentran hacinados los animales son lugares pequeños en los que ven limitados sus movimientos; grupos ambientalistas han denunciado que en ocasiones la suciedad es prolongada por varios días.
José Ángel Capetillo Victoriano, director de Medio Ambiente Municipal, rechazó los señalamientos, afirmando que se brinda la atención adecuada a todos los animales.
Sin embargo, reconoció que han existido casos de muertes, producidas por enfermedades que no se relacionan con ningún tipo de maltrato animal.
Señaló que en todos los casos se dio aviso a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), que es la autoridad que regula el bienestar de los animales.
FUNCIONA COMO PIMVS
Actualmente el zoológico “Miguel Ángel de Quevedo” cuenta con la certificación de Predios Intensivos de Manejo de Vida Silvestre (PIMVS), que otorga la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales para poder albergar fauna silvestre de la región.
Por lo anterior, es refugio de animales maltratados, heridos o que son asegurados en operativos de la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa).
Entre las especificaciones legales del modelo PIMVS se busca que aquellos ejemplares que son aptos, puedan incorporarse a un ecosistema con un plan de manejo ambiental adecuado.
El recinto es reconocido como un espacio tradicional para las familias veracruzanas, pero es al mismo tiempo uno de los últimos reductos de conservación ambiental en la zona urbana de la ciudad de Veracruz.
En su interior se pueden encontrar no solo animales rescatados, sino también un manantial que nace en una laguna, el árbol más antiguo de la ciudad con más de 300 años y un pequeño jardín botánico.
Al inicio del gobierno municipal de Fernando Yunes Márquez se lanzó una consulta pública para que se votara, a través de agrupaciones civiles, qué propuestas podrían ser aplicadas en el lugar para mejorarlo.
Hasta ahora se desconoce qué proyecto fue el ganador de entre los planteados por entidades académicas y grupos ambientalistas, que iban desde una remodelación integral, hasta su transformación en un parque botánico que sirviera para la promoción de la preservación del ambiente.
ESCÁNDALOS RECIENTES SOBRE MALTRATO ANIMAL
Fotografías y videos tomados por visitantes muestran a animales en un mal estado, con evidente descompensación en su peso corporal.
En una de las grabaciones una martucha camina en una jaula sucia, al parecer con un peso corporal menor al adecuado.
Otras fotos dejan ver un par de tortugas al fondo de una cubeta, de una de ellas se ve solo el caparazón, supuestamente ambas murieron.
En un video se muestra a un ave rapaz que es manipulada por personal de zoológico, al parecer muerta.
“Las malas condiciones no tienen nada que ver con un maltrato a los animales, llevan una excelente dieta, no les ha faltado ni alimentación ni medicinas”, refutó el director.
Apenas el viernes 1 de noviembre un ejemplar de guacamaya Verde fue robada en condiciones extrañas del área clínica del recinto, según lo reportado por la administración del zoológico a la Dirección de Medio Ambiente.
Dicho ejemplar habría desaparecido de su jaula en un área donde no se observó violación de cerraduras o candados.
Al respecto, el director señaló que se presentó denuncia ante la Fiscalía General del Estado y se dijo imposibilitado para presentar más detalles.