Orizaba, Ver.- A partir de hoy y hasta el jueves 29, el teleférico suspende su actividad pues recibe mantenimiento, dio a conocer el coordinador de Turismo en la ciudad, Fernando Trueba Coll.
Lo que se hace es una revisión de toda la línea de rodamiento y se lubrica la misma. Esta supervisión se hace tras el periodo de vacaciones de verano, que fue de mucha afluencia para el funicular.
En entrevista mencionó que este trabajo se programa cada mes y está a cargo del personal que trabaja en ese atractivo, que recibió capacitación de parte de los especialistas de la empresa Leitner-Poma, que instaló el teleférico.
Este tipo de cuidado es preventivo y, lo hacen antes de los periodos vacacionales, para que el equipo esté en óptimas condiciones, pues durante ese tiempo su funcionamiento es mayor y, también al término del asueto, para que se mantenga en buen estado.
Explicó que generalmente detienen el funcionamiento del funicular durante tres días para que la revisión sea completa por seguridad de la población que se sube a este atractivo turístico.
Apuntó que el mantenimiento anual lo recibió cuando se hizo la ampliación del número de cabinas y, quienes lo hacen son los especialistas de la empresa Leitner-Poma.
Teleférico, con semáforo que avisa si es seguro el recorido
Señaló que en los años que tiene el teleférico, desde su inauguración, en diciembre del 2013, durante la administración de Hugo Chahín Maluly, se le ha dado el mantenimiento anual y mensual programado sin ningún contratiempo.
Por ello, apuntó, es que no ha tenido desperfecto ni ha sido necesario suspender su funcionamiento fuera de los días de supervisión del equipo, para atender alguna emergencia.
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Cabe recordar que el teleférico cuenta con un semáforo que, en los días que se prevé haya lluvia, tormenta eléctrica o surada, avisa a los visitantes si el funicular funciona o no.
Si la luz es verde, funciona de manera normal; si la luz es amarilla, hay probabilidad de que se suspenda el ascenso en algún momento a consecuencia de las condiciones meteorológica como viento superior a los 30 kilómetros por hora o tormenta eléctrica; la luz roja señala que no hay condiciones óptimas para que funcione.
Si mientras el teleférico está en funcionamiento detecta alguna de las situaciones anteriores en su trayecto, se detiene automáticamente y, reanuda el ascenso-descenso hasta que sus sensores detectan que ya no hay riesgo; es decir, no deja de funcionar porque se averíe, sino por seguridad.