Orizaba, Ver.- La violencia que vivían dos familias en municipios de las Altas Montañas alcanzó tal nivel que afectó a todos sus integrantes, pues los hijos terminaron con la vida del agresor, aseveró Luz María Reyes Huerta, activista de Marea Verde Altas Montañas.
En los últimos días, a la población de las Altas Montañas conmocionó dos casos de violencia, uno se registró en Rafael Delgado y otro en Orizaba, donde tres jovencitos cometieron parricidio, al parecer, en un intento por defender a su madre de la agresión que sufría a manos del papá.
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La también abogada, dijo en entrevista, que esto es consecuencia de la inactividad de la Policía Municipal, que es la primera respondiente para atender los casos de violencia y, mientras no lo hagan se seguirán presentando.
Resaltó que la falta de intervención de las autoridades también de la Fiscalía, que no reciben la denuncia de las mujeres y, por lo contrario, las revictimizan; o si la reciben, el proceso de la misma es muy tardado, ocasiona que los agresores sigan teniendo la sensación de impunidad o que los directamente afectados por esa violencia llegan al extremo de detenerla de manera definitiva, con sus propias manos.
¿Cuál es la situación de los adolescentes que asesinaron a su padre?
Al referirse al caso de los adolescentes que cometieron parricidio, dijo que ellos se rigen por un proceso especial para menores, además de que hay estándares nacionales e internacionales para procesarlos.
“Sobre esos lineamientos tanto estatales como nacionales e internacionales es que les deben aplicar la justicia y tomar en cuenta el nivel de violencia en los que vivían, al momento de definir su situación jurídica”, explicó.
Destacó que establecer y hacer efectivo (visibilizar), el nivel de violencia que afrontaban es trabajo de su defensa, para que el juez al momento de resolver tome en cuenta todas esas circunstancias.
Un tercer caso de violencia que también causó indignación entre la población, lo vivió una joven psicóloga que fue golpeada por su pareja (un médico), dejándola gravemente herida. Para ella su familia exige justicia.
“Insisten en la percepción de impunidad, la chica está grave debatiéndose entre la vida y la muerte y él haciendo su vida completamente normal; incluso hacen señalamientos de amenazas en contra de familiares, de parte del agresor”, dijo.
Eso, añadió, pone en claro cuán impunes quedan las cosas en algunas ocasiones o que mensaje mandan las autoridades al agresor, pues tal pareciera que no pasó nada.
Para recordar:
El 16 de febrero de este 2024, en el municipio de Rafael Delgado, un menor de 16 años de edad asesinó a su padrastro cuando éste agredía a su madre y abuelo.
El adolescente fue detenido por elementos de la Policía Municipal y puesto a disposición de las autoridades correspondientes, para definir su situación jurídica.
El pasado lunes 18 de marzo, dos hermanos, una de 22 años y otro de 16, mataron a cuchilladas a su papá, al parecer, en un intento por defender a su madre, quien era agredida por su progenitor.
Se conoció que ambos hermanos permanecen en una instancia segura mientras las autoridades realizan la investigación correspondiente.
El caso más reciente, fue el de una psicóloga de 29 años, quien fue agredida por su pareja, un médico que labora en una clínica del municipio de Atzacan, contra quien familiares de la profesionista puso denuncia por feminicidio en grado de tentativa.
De acuerdo con su versión, no es la primera vez que el galeno la golpea, a pesar de haber dado a luz hace apenas siete meses.
