La extradición de Miguel Ángel Treviño Morales, solicitada por el Gobierno de Estados Unidos, sería un acto de “traición a la patria”, acusaron los abogados del imputado. Según la defensa legal, el hombre que está encarcelado en México no es el Z-40, señalado como líder de Los Zetas, sino un homónimo.
Este error de identidad ya fue avalado en México por siete resoluciones judiciales diferentes, mismas que han anulado las acusaciones contra Treviño Morales por delincuencia organizada. Incluso, indicaron los abogados, la misma Fiscalía General de la República (FGR), luego de un careo del imputado con testigos protegidos, reconoció que la persona encarcelada en México no corresponde al Z-40.
Testigos protegidos cercanos a Los Zetas bajo pseudónimos como Pitufo, Tiburcio, Serpico, Tauro, Sagitario, Karen, Paco y Rafael, entre otros, informaron en diferentes audiencias que la persona encarcelada en México no cumple con las características físicas de la persona que ellos conocieron como el Z-40.
Entre las principales diferencias, según los expedientes judiciales, está que el Z-40 tenía un tatuaje en el pecho y cicatrices en abdomen y cráneo; sin embargo, el acusado en México no las tenía.
Según los abogados, el testigo protegido Rafael tuvo cara a cara al imputado en nuestro país, y señaló a otra persona como el Z-40: “no te conozco, nunca te he visto y no sé quién eres”, habría dicho el testigo al acusado.
Pese a esto, el supuesto homónimo del líder de Los Zetas permanece preso en el Cefereso 4, ubicado en Tepic, Nayarit, y no puede ser liberado debido a que Estados Unidos mantiene dos solicitudes de extradición pendientes.
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Por ello, el abogado Juan Manuel Delgado González extendió este martes 17 de septiembre un llamado al Gobierno de México y a la Secretaría de Relaciones Exteriores a que ejerza “defensa consular” hacia Treviño Morales:
“En México se ha demostrado que él no es el Z-40; sin embargo, sería un acto de traición a la patria extraditarlo, porque no sería una extradición, sería un destierro”, apuntó el defensor legal.
Delgado González afirmó que en Estados Unidos es común la “fabricación de pruebas” para conseguir solicitudes de extradición, e incluso refirió que existen expedientes judiciales en EU en los que se advierte que un tal Miguel Ángel Treviño Morales, alias Z-40, fue detenido en la prisión de Bastrop County, en el condado de Texas, el 12 de junio de 2012, y según los abogados, permanece preso.
“Es decir, Estados Unidos afirmó que existe un Miguel Ángel Treviño Morales con alias Z-40 que está detenido en los Estados Unidos. Tal vez sí, porque mi defendido no es el Z-40”, indicó el defensor legal.
En la conferencia de prensa los abogados afirmaron que Estados Unidos suele falsear pruebas para conseguir extradiciones de presuntos criminales mexicanos a aquel país, y definir la situación jurídica de los acusados en EU al obtener información con “operaciones ilegales”. Este tipo de acciones, acusaron, se relacionan con los casos de Rafael Caro Quintero, o el más reciente de Ismael ‘El Mayo’ Zambada García.
El abogado también acusó al embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, de realizar declaraciones que violan la presunción de inocencia del homónimo del Z-40, mismas que, señaló, podrían influenciar al jurado popular de Estados Unidos en un eventual juicio en aquel país. Esto, luego de que Kenneth Lee Salazar dijera que el Z-40 ha matado a “muchas personas” en México y Estados Unidos como líder de Los Zetas.
“Estos dos líderes de los carteles, que han matado a la vista de nosotros muchas personas y provocado mucha violencia tanto en México como en Estados Unidos, han estado en espera de la decisión de un juez por muchos años: el Z-40 por más de 10 años y el Z-42 por nueve años. No hay ninguna decisión de la Corte sobre estos dos y nosotros tenemos una petición de extradición”, dijo Ken Salazar.
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Ante ello, la defensa legal de Treviño Morales presentó una denuncia contra Salazar ante la FGR, misma que determinó que el delito en el que pudo haber incurrido el embajador fue el de “falsedad de declaraciones”. No obstante, la autoridad mexicana se abstuvo de investigar a Ken Salazar por el concepto de “inmunidad consular”.
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