El exgobernador tamaulipeco Eugenio Hernández Flores ya está recluido en el Centro de Ejecución de Sanciones de Ciudad Victoria tras haber sido detenido en Ciudad Victoria.
Hernández Flores contaba con una orden de aprehensión librada desde el pasado 4 de octubre de 2017 por el Juzgado Segundo de Primera Instancia Penal de Ciudad Victoria, por la probable comisión de los delitos de peculado y operaciones con recursos de procedencia ilícita.
Fue el pasado 28 de septiembre cuando la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción ejercitó acción penal y solicitó la orden de aprehensión en contra de Eugenio Hernández.
La acusación se basa en que Hernández Flores, a través de sus prestanombres Alberto Berlanga Bolado y la empresa GMC, S.A. de C.V. de Altamira, realizó en 2007 una operación de compra por 16 millones de pesos de un terreno de mil 600 hectáreas, ubicadas en el Puerto Industrial de Altamira y que pertenecen al patrimonio del estado.
Para la operación de compra-venta participaron las empresas Materiales y Construcción Villa de Aguayo, propiedad de Fernando Cano Martínez, presunto prestanombres de Tomás Yarrington y GMC, S.A. De C.V, de Altamira, propiedad de Alberto Berlanga, ex secretario de Obras Públicas y Desarrollo Urbano, en el gobierno de Eugenio Hernández Flores.
Eugenio Hernández Flores fue gobernador del estado de 2005 al 2010; presidente municipal de Ciudad Victoria, del 2001 al 2004; Diputado Federal por Ciudad Victoria, en el 2000, así como coordinador del Comité de Financiamiento del entonces candidato a gobernador, Tomás Yarrington Ruvalcaba.
La detención de Hernández Flores es la segunda que se da contra un exgobernador de Tamaulipas de extracción priísta, ya que el pasado 9 de abril fue detenido Tomás Yarrington Ruvalcaba en la ciudad de Florencia, Italia, al ser acusado de los delitos de delincuencia organizada y de operaciones con recursos de procedencia ilícita.
En su momento a Eugenio Hernández Flores se le asociaba con operaciones de lavado de dinero por más de 30 millones de dólares, por lo que el gobierno de Estados Unidos presentó una acusación formal en su contra.
De estas acusaciones el exmandatario estatal las rechazó y argumentó que todo su patrimonio era legítimo, pero a pesar de ello el Departamento de Justicia de Estados Unidos giró un oficio donde se daba a conocer que Hernández Flores y su cuñado Óscar Gómez Guerra estaban acusados de lavado de dinero, misma que se formalizó el 27 de mayo del 2015.
Además se le otorgó un aviso de confiscación de cuatro propiedades, de las cuales tres están ubicadas en McAllen Texas, con un valor de más de dos millones de dólares, mientras que una tercera se localiza en Austin, Tex.
Durante el mandato de Hernández Flores, en las campañas para elegir gobernador, fue asesinado el candidato del PRI, Rodolfo Torre Cantú, quedando su hermano Egidio como mandatario estatal.