El presidente Enrique Peña Nieto aseguró que son ingenuos y negligentes los que creen que con buenos deseos se puede detener a los criminales, por lo que anunció que las Fuerzas Armadas seguirán en las calles el tiempo que sea necesario ya que es claro que algunos confunden violencia con el uso legítimo de la fuerza para defender a una población ante un agresor que no entiende razones y menos de leyes.
En el marco de la entrega de Menciones Honoríficas a las Unidades del Ejército, Fuerza Aérea y Armada de México; Peña Nieto reconoció que México vive una compleja situación de inseguridad que se vive en diversas zonas del país, que “ha puesto en evidencia la debilidad institucional de sus policías locales, por lo que en esas zonas la única opción que tiene el Estado para enfrentar con éxito a las organizaciones crimínales es la que ofrecen nuestras Fuerzas Armadas y la Policía Federal”.
Por lo anterior, el Primer Mandatario sentenció que las Fuerzas Armadas no pidieron salir a las calles a combatir al crimen organizado, fueron los gobiernos locales y la población afectada quienes requieren el auxilio del Ejército, la Fuerza Aérea y la Armada para recuperar la paz y el orden en sus comunidades.
“Hay quienes afirman que la violencia no se combate con violencia. Es claro que confunden violencia con el uso legitimo de la fuerza para defender a una población inerme ante un agresor que no entiende razones y menos de leyes.
“Sería ingenuo y negligente creer que con buenos deseos se puede detener a los criminales. Por eso, el Gobierno de la República respondió sin titubeos a ese llamado y por eso mantendrá la presencia de nuestras Fuerzas Armadas en donde se requieren y por el tiempo que sea necesario”, expresó.
El Jefe del Ejecutivo apuntó que el Ejército, Fuerza Aérea y Armada de México contribuyen de manera destacada en la lucha para recuperar las condiciones de paz y seguridad.
También, enfatizó que gracias a la participación de las Fuerzas Armadas se han logrado detener 109 de los 122 objetivos generadores de violencia en él país, siendo llevados estos lideres ante la justicia, dejando diezmada su presencia en las regiones del país y su capacidad financiera.