El Parlamento de Cataluña aprobó este viernes una declaración de independencia, una medida "vacía" sin consecuencias a nivel internacional, según Jean-Claude Piris, consultor en derecho internacional en Bruselas.
El término declaración unilateral de independencia (UDI), se usó por primera vez en 1965, cuando una minoría gubernamental de Rodesia declaró la independencia unilateral de la colonia británica.
El proceso se refiere al establecimiento de un nuevo Estado dentro de un país existente, declarándose soberano e independiente sin el consentimiento del Estado del que se separa.
A continuación, Jean-Claude Piris, quien también fue director de los servicios jurídicos del Consejo de la Unión Europea (UE) durante 23 años, responde a algunas preguntas sobre las implicaciones de la declaración de independencia del Parlamento catalán.
¿Tiene derecho Cataluña a declarar su independencia unilateralmente?
Cualquier entidad tiene derecho a declarar su independencia. Pero para convertirse en Estado, se requiere un territorio, una población y autoridades, pero sobre todo, lo que importa aquí, es el reconocimiento de la comunidad internacional.
Todo el mundo tiene derecho a hacer una declaración de independencia, pero eso no tiene ninguna consecuencia en el plano internacional en sí mismo. Es muy probable que muy pocos Estados reconozcan un Estado catalán. Les garantizo que nadie la reconocerá dentro de la UE.
Así que se quedará como una declaración vacía. [Los catalanes] no estarán representados en las organizaciones internacionales, no se sentarán en la UE, no podrán hacer nada y seguirán formando parte de España jurídicamente.
¿Es legal esta declaración unilateral de independencia?
Es inimaginable que un tribunal internacional diga que el derecho a la autodeterminación se aplica a los catalanes. La UE está basada en la aplicación de las leyes ante todo. Los catalanes no tienen derecho a decidir formar un Estado.
Ese derecho solo se aplica en caso de opresión y de explotación de un pueblo. Fue el caso de las colonias, como explica una sentencia de la Corte Constitucional de Canadá de 1998 respecto a la secesión de Quebec.
Está realmente reservado a la gente oprimida, que no tiene derecho a la democracia, que está mal tratada. Pero no es para nada el caso de Cataluña, que goza de todos los derechos democráticos.
¿Qué ocurrirá ahora?
Lo que importa ahora es lo que ocurra a nivel nacional y en la calle. ¿Habrá manifestaciones o barricadas? ¿Lo aceptará la gente y se someterá o habrá actos de violencia? ¿Se detendrá y juzgará a la gente? No hay que olvidar que España vivió una guerra civil no hace tanto [1936-1939].
Pero el derecho de la UE seguirá aplicándose en Cataluña, España seguirá representándola. No habrá controles en las fronteras de Cataluña con España o de Cataluña con Francia. Los catalanes seguirán utilizando el euro y seguirán vinculados por todos los acuerdos internacionales ratificados por España.
/eds