Orizaba, Ver.- Autoridades policiacas dieron a conocer que los cuatro cuerpos desmembrados y arrojados en avenida Morelos, de la comunidad de Sumidero, Ixtaczoquitlán, fueron identificados en el transcurso del jueves.
Uno de ellos es Alejandro M. R., habitante de la comunidad Paredón Viejo, y fue su esposa Dolores, quien reclamó el cuerpo.
Mientras que los otros son: Adrián A. C., comerciante de chayote, avecindado en Cuautlapan, Ixtaczoquitlán, al parecer con familia en Tequila, y Moisés M.M., de 25 años, residente de Calzada Jalapilla, perteneciente al municipio de Rafael Delgado, y finalmente Miguel C. G., de 39 años con domicilio en Rincón Grande.
Los familiares dijeron desconocer las actividades de los fallecidos, y tampoco supieron detalles de la desaparición, hasta que los vieron en las instalaciones del Semefo.
Autoridades ministeriales le hicieron unas entrevistas para conocer si tenían problemas con alguna persona o si habían sido amenazados, pero las respuestas fueron negativas respectivamente.
Por ello, una vez que comparecieron y acreditaron con documentos ser familiar de los finados, los reclamaron para darles sepultura.
Por su parte autoridades policiacas confirmaron que las cuatro personas despedazadas y arrojadas en bolsas negras, en la congregación zoquiteca de Sumidero, la tarde del miércoles, estaban desaparecidas horas antes de su hallazgo.