Orizaba, Ver.- Los cadáveres de dos personas ejecutadas en la zona de Río Blanco y Nogales, no han sido identificados y reclamados por sus familiares, por lo que permanecen en la morgue.
Uno de los ejecutados es el nombrado "Comandante Perro", según lo describió la cartulina que dejaron junto a las extremidades inferiores, las cuales fueron arrojadas abajo del puente de la autopista Puebla-Veracruz, que pasa a escasas cuadras de Palacio de Gobierno de Nogales.
El torso del “Comandante Perro” fue colgado del barandal del citado desnivel, en donde apareció la madrugada del domingo, tras ser torturado y desmembrado por sus captores.
El otro cuerpo es el encontrado el pasado 30 de noviembre en la calle Valentín Gómez Farías, de la colonia Benito Juárez, de Río Blanco.
Los restos mutilados de un hombre joven, fueron arrojados por sus verdugos en bolsas negras, al pie de la calle, cerca de una tienda de autoservicio.
Las autoridades policiacas las recogieron y trasladaron al Servicio Médico Forense (Semefo), en donde fue reconstruido por peritos criminalistas y el médico legista en turno del Departamento de Servicios Periciales.
En ambos casos la Policía Ministerial Acreditable (PMA) ha tomado conocimiento para investigar y esclarecer los hechos, pero hasta el momento ni siquiera han sido reclamados los cuerpos, por lo cual las diligencias permanecen varadas, sin resultados.
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